Las letras más triztes...

Necesitaba desahogar todo el dolor que llevo dentro. Desde el lunes 10 de septiembre, mi alma se dividió en 2 y una de las mitades se las llevó mi pequeña hermana. La mitad del alma que me queda la tengo tendida de un hilo para que no se me vaya porque la necesito para luchar junto a mis padres destruidos. Se nos fué... es tan dificil de decir, y más cuando una niña llena de vida, a pesar de sus padecimientos, se nos fué sin tener preparación emocional.
Mi hermanita nació un 6 de marzo de 1987 y desde ese día comenzó la lucha infinita pero llena de amor de mis padres. Ella era era un ángel; un rayito de luz que alumbraba todo lo que tenia a su paso. Todo el mundo era adoración con ella y ella lo era con todos. Recuerdo que siempre que me le acercaba a darle un beso, siempre doblaba su cabecita para que posara mis labios en ella. Ella era mi gran confidente, ya que por su condicion, no podia hablar pero yo sentia que me escuchaba y me comprendía, y hasta me consolaba. Siempre que estaba enferma o tenia algun fuerte dolor, siempre pasaba sus diminutas manos por mi cara, como para decirme que estaba conmigo.
Ella era un angel que Diosito nos prestó para cuidarnos y mantenernos juntos en las buenas y en las malas. Pero aunque era un angel prestado, nos hubiera encantado, tenerla por muchos años más, para que mis futuros hijos la conocieran y la quisieran tanto como la quice yo. Lo que me duele de su despedida, es que esos futuros hijos, solo podran conocerla por fotos y por la historia de su hermosa vida. Yo se que apesar de todo, ellos la querran porque sera su ángel de la guarda. Ahora espero que mis padres y yo, podamos reponernos de esta gran perdida muy pronto porque sabemos que ella quiere que estemos felices, como ella lo esta ahora, con sus hermosas alas blancas.